Desafíos en la gestión de los inmuebles del Obispado en La Laguna: IBI impago, propiedades cuestionadas y templos en disputa

El Ayuntamiento de La Laguna está enfrentando una compleja situación relacionada con el cobro del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) a la Iglesia. A pesar de haber elaborado una lista de propiedades exentas en 2012, ahora se está revisando nuevamente debido a nuevas circunstancias.

Recientemente, el consistorio decidió cobrar el IBI al Obispado, pero para ello requiere distinguir entre los inmuebles utilizados para fines religiosos y los que no lo son. Esta distinción es crucial, ya que la exención del impuesto solo se aplica a los primeros. Aunque el Ayuntamiento ha recibido documentación del Obispado sobre el uso de cada propiedad, este no es un problema nuevo.

En 2012, se elaboró una lista similar de propiedades que no pagaban el IBI y que no estaban destinadas específicamente a fines religiosos o educativos. Además, se han planteado interrogantes sobre la legitimidad de algunas inmatriculaciones de bienes por parte de la Iglesia, especialmente tras un informe de la Conferencia Episcopal Española en 2022 que identificó posibles irregularidades en registros de propiedades desde 1998.

A pesar de la intención del Ayuntamiento de revertir la propiedad de los bienes cuestionados a sus legítimos dueños, la acción legal se ha visto obstaculizada por la falta de impugnaciones y estudios técnicos sobre las inmatriculaciones. Mientras tanto, el consistorio ha reivindicado la propiedad de algunas plazas que la Iglesia reclamaba como propias.

Aunque se espera una resolución sobre qué propiedades deben pagar el IBI, parece improbable que el Ayuntamiento impugne las inmatriculaciones cuestionadas. La complejidad legal y la falta de recursos públicos para procedimientos legales adicionales han limitado las acciones municipales en este sentido.

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